River, semifinalista de la Copa Libertadores tras cuatro años
Venció 1-0 en la revancha a Colo-Colo, en un partido cerrado y con sufrimiento hasta el final, para agigantar el idilio de los hinchas con el DT más ganador.
Los minutos finales llegan cargados de angustia. Se sufre en el Monumental. Pero el final es feliz. Cuando Franco Armani atenaza la última bola de la noche y el uruguayo Andrés Matonte termina el partido, los nervios desaparecen. Y en Núñez se desata la fiesta, con los jugadores cantando al compás de los hinchas. Con el triunfo 1-0 sobre Colo-Colo, River no solo consiguió el pasaje a las semifinales de la Copa Libertadores, en la que estará después de cuatro ediciones, sino también que le pone el moño a una semana perfecta, con el triunfo ante Boca en la Bombonera en el medio. Y celebró en el partido 400 de su historia en el máximo torneo continental de clubes.
River abrió este martes el marcador a los 16 minutos con la aparición de Facundo Colidio, que llegó para definir solo atrás de toda la defensa de Colo-Colo luego de un envío de que Santiago Simón devolvió la pelota al área en una segunda jugada de una pelota parada. Al ex Tigre, que se ganó su lugar tras su gran actuación en el Superclásico, lo habilitó Arturo Vidal, que quedó enganchado. Justo el que chicaneó y picanteó la previa toda la semana.
El gol no cambió mucho el escenario inicial pero sí la postura de River, que, con más energía y envalentonado por la apertura del marcador empezó a tener más presencia en el juego. Y con más confianza. Tanto que hasta Franco Armani (llegó a los 100 partidos en Libertadores) se animó a gambetear a Vidal cuando el chileno fue a presionarlo en una salida.
El segundo tiempo se presentó de la misma manera. Y con el correr de los minutos, el desarrollo se hizo cada vez más áspero.
River no podía tener la pelota. Entonces, Gallardo mandó a la cancha a Lanzini. Salió Meza y el equipo se reordenó en un 4-1-4-1, pero la pelota la tenía el equipo chileno. Ni siquiera manejó bien las contras el equipo del Muñeco. Entonces, aguantó, resistió y...festejó.